El Paso, Texas. – Una vez más, las persecuciones del Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS) dejaron secuelas en plena zona urbana, luego de que la mañana del viernes se registrara un aparatoso choque en el centro de la ciudad que involucró a patrullas de los llamados “troopers”.
El accidente ocurrió en la intersección de Oregon Street y Yandell Drive, a unos metros de la autopista I-10, donde varios vehículos colisionaron tras una persecución a alta velocidad. De acuerdo con el Departamento de Bomberos de El Paso, al menos una persona resultó herida y fue trasladada a un hospital local.
Las persecuciones del DPS, comúnmente dirigidas a vehículos sospechosos de transportar migrantes, han sido frecuentes en la región fronteriza. En múltiples ocasiones, estas han terminado en volcaduras o choques graves en las inmediaciones de El Paso. Sin embargo, en este caso, fueron las propias unidades del DPS las que se vieron implicadas en el percance.
Imágenes compartidas en redes sociales confirmaron la presencia de patrullas estatales en el lugar del siniestro, mientras testigos relataron que todo comenzó cuando un vehículo sospechoso ingresó al área urbana a gran velocidad, provocando una persecución que terminó en la concurrida intersección.
Alrededor de las 11:10 de la mañana, la zona fue acordonada por elementos policiales y equipos de rescate, mientras se realizaban labores de auxilio y se iniciaba la investigación para esclarecer las circunstancias del choque.
Hasta el momento, las autoridades no han revelado la identidad de la persona lesionada ni los detalles del vehículo perseguido.
El incidente reavivó las críticas hacia la estrategia de persecuciones en áreas urbanas. Vecinos y activistas han advertido que este tipo de operativos no solo ponen en riesgo a los sospechosos, sino también a conductores inocentes y transeúntes que se encuentran en el camino.
“El DPS debería repensar sus tácticas en la ciudad. Esto no es una carretera aislada, aquí hay familias, negocios y mucho tráfico”, comentó un residente del centro de El Paso tras el accidente.
Mientras la investigación avanza, la comunidad fronteriza vuelve a quedar marcada por los riesgos de las persecuciones estatales que, en su intento por frenar la migración irregular, terminan dejando huellas en la seguridad de la propia ciudad.